¿Es posible la reducción del consumo de herramienta con un cambio de taladrinas? La respuesta es, a todas luces, afirmativa. En este nuevo caso de éxito mostramos los beneficios que un cambio en el empleo de lubricantes refrigerantes aporta a los trabajos de mecanizado para el sector aeronáutico.
En este caso, nuestro cliente contaba con dos plantas de mecanizado que debían hacer frente a un incremento en la producción de entregas para una importante empresa del sector aeronáutico. Para optimizar el consumo de lubricantes y realizar un trabajo más eficiente y con mayor control medioambiental, planteamos la viabilidad de realizar un cambio en la taladrina utilizada por otra que ofreciera un mayor rendimiento y prestaciones.
Objetivos de la acción: optimización del consumo
Como siempre, la colaboración de la dirección de la empresa y sus responsables de producción, mantenimiento y seguridad laboral ha sido fundamental en el desarrollo de este proyecto.
En este cambio de taladrinas se ha buscado conseguir la mayor rentabilidad en los trabajos de mecanizado. Junto a este objetivo, el proyecto pretendía, entre otros:
- Reducir el consumo de herramienta en, al menos, un 25%.
- Bajada del consumo de taladrina al 50%, al reducir la limpieza de los depósitos y la taladrina evaporada.
- Aplicación de un producto más saludable.
- Mejora de la calidad del aire en el espacio de trabajo.
Fases del proyecto: así realizamos el cambio de taladrinas
El trabajo desarrollado en las dos plantas de mecanizado se ha basado en tres ejes prioritarios: formación (a responsables y operarios) | asesoramiento | análisis.
- Formación a los responsables de producción y mantenimiento en el uso y mantenimiento del producto. Aportación de cuadro para control de taladrina.
- Ayuda y asesoramiento en el proceso de limpieza de máquinas y posterior llenado.
- Formación in situ a los operarios de máquina que les permitió adquirir capacidad de control sobre la estabilidad de la emulsión.
- Realización rutinaria de análisis de productos en uso en planta y regularmente en laboratorio.
Beneficios conseguidos en la planta
Tras la ejecución del proyecto, el balance es positivo, consiguiendo los siguientes beneficios:
- El rechazo de piezas se vio drásticamente reducido. Igualmente, el repaso de piezas se limitó a incidencias residuales.
- Reducción de consumo de herramienta en un 35%. El uso de un éster frente a una taladrina de aceite mineral provocó, en gran medida, esta mejora.
- La formación impartida sobre el mantenimiento de la emulsión logró una reducción del consumo en un 30% y prolongación de la vida de la taladrina doblándola o incluso triplicándola. Esto se tradujo en otro importante ahorro, no solo en el consumo sino en el tiempo de máquina parada sin producir y en la disponibilidad de tiempo extra para su mantenimiento.
- Debido al control adquirido por los operarios sobre la taladrina, el uso adicional de otros productos (Bactericidas o modificadores del PH), se ha reducido de forma considerable.
- Mejora de la calidad del aire, pues la nueva taladrina se evapora mucho menos; así los operarios respiran menos taladrina y más agua evaporada.
- El fabricante reconoce el producto en sus auditorías, dando conformidad a los procesos realizados en las dos plantas.
En los trabajos de mecanizado, el asesoramiento y análisis de los lubricantes refrigerantes empleados permite buscar las mejores opciones que alarguen la vida útil garantizando un consumo eficiente.
En LUFILSUR, además de la comercialización y distribución de lubricantes refrigerantes en Andalucía y Extremadura, contamos con un servicio de asesoramiento especializado. Contacta con nosotros y te ayudaremos en el cambio taladrinas en tu planta.