Si trabajas en un taller de mecanizado, tal vez alguna vez te ha pasado esto: "regresáis de las vacaciones y un insoportable olor os da la bienvenida". ¿Qué ha pasado durante este tiempo? O quizá sea más adecuado decir, "¿qué no se hizo para evitar este problema".
Dejar el lubricante refrigerante sin el cuidado adecuado tiene consecuencias muy desagradables. Durante las paradas técnicas, que suelen coincidir con los periodos vacacionales, es importante realizar una serie de tareas previas para evitar que los microorganismos hagan de las suyas.
En máquinas con mucho aceite contaminante y paradas prolongadas, se darán condiciones óptimas para aparición de bacterias y problemas de malos olores. Si quieres evitarlo, toma nota de las siguientes recomendaciones y prepara correctamente el lubricante refrigerante antes del merecido descanso. Se trata de un plan sencillo, pero muy eficaz.
Plan para evitar problemas en el lubricante refrigerante
Un par de días antes del comienzo de las vacaciones es conveniente retirar todas las capas superiores de la superficie de emulsión.
Elimina todas las virutas de la máquina. Activa el transportador de virutas hasta que estén todas en el contenedor correspondiente.
Retira todas las abrazaderas y otros tipos de fijaciones del banco de fresado y enjuaga el centro de mecanizado y el banco. Hazlo siempre de arriba a abajo. Esto se puede hacer con el pulverizador disponible y la emulsión existente, que además de limpiar bien, ofrece una excelente prevención contra la corrosión durante el periodo de vacaciones.
El día del cierre, asegúrate de que todos los depósitos estén llenos al máximo con el lubricante refrigerante correspondiente. Puedes llenar los bancos desde el dispositivo mezclador/bomba mezcladora. Haz funcionar las bombas durante al menos 30 minutos para que las máquinas se aclaren eficazmente. No es necesario medir la concentración en esta etapa.
Ajusta la concentración: una vez que la emulsión recién añadida se haya mezclado con la ya existente en el banco de torneado, fresado o rectificado, es importante medir la concentración de cada banco y ajustarla si es necesario.
Este ajuste se puede hacer añadiendo puro el concentrado/aceite a una bomba en funcionamiento. Después, hay que dejar que todos los bancos se enjuaguen durante aproximadamente 45 minutos, encendiendo todas las bombas y abriendo todas las boquillas.
Consejo: durante los periodos de vacaciones, aumenta la concentración en un 1-2% más de lo recomendado por el proveedor.
Quita otra vez las capas superiores que queden en la superficie de la emulsión y, si es posible, abre un poco la cubierta del depósito de emulsión, en caso de que esté completamente cerrado, para que entre oxígeno.
Elimina los restos de emulsión de las tuberías, mangueras y la bomba de mezcla, ya que en todos los casos hay una baja concentración y un tiempo de inactividad prolongado que ofrece condiciones ideales para el crecimiento de microorganismos. Drena bien las mangueras y desconecta la bomba mezcladora temporalmente, dejándola sin llenar con el lubricante refrigerante.
Si habitualmente utilizas un carro de llenado para reponer la emulsión en las máquinas, es conveniente vaciarlo y enjuagarlo.
Aprovecha para limpiar bien el carro de recarga y guárdalo seco y vacío, ya que la emulsión residual a baja concentración, combinada con un tiempo de inactividad prolongado, propicia el crecimiento de microorganismos.
Con este plan, propuesto por el fabricante rhenus lub, el aceite de corte se mantendrá en óptimas condiciones y evitarás sorpresas desagradables tras el regreso.
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