Los sistemas hidráulicos son el corazón de muchas máquinas industriales. Desde prensas hasta grúas o líneas de producción automatizadas, su fiabilidad depende en gran parte del mantenimiento que se les dé. Y aunque el mantenimiento correctivo puede salvarte alguna vez, es el mantenimiento preventivo el que realmente marca la diferencia.
Aquí te dejamos una checklist práctica y completa, con explicaciones claras, para que puedas revisar paso a paso todo lo necesario y garantizar el buen estado de tu sistema hidráulico.
¿Qué no puedes pasar por alto en el mantenimiento preventivo de sistemas hidráulicos?
Inspección visual
Parece básico, pero es lo primero que muchos olvidan. Haz una revisión visual periódica de todos los componentes del circuito: mangueras, tubos, racores, cilindros, bombas y válvulas. Busca grietas, corrosión, manchas de aceite o cualquier síntoma de fuga.
Consejo: si detectas una fuga, no la subestimes. Muchas veces es la señal de una sobrepresión o de un racor mal ajustado.
Nivel y estado del aceite hidráulico
El fluido hidráulico es tan importante como la sangre en nuestro cuerpo. Debe estar en el nivel adecuado y con las propiedades correctas. Con el tiempo, el aceite puede degradarse por temperatura, humedad o contaminación.
¿Qué revisar? 👇
- Color: si ha oscurecido, puede haber oxidación.
- Olor: si huele a quemado, hay sobrecalentamiento.
- Presencia de espuma o agua.
¿Cada cuánto cambiarlo? Dependerá del fabricante, pero si el sistema trabaja en condiciones severas (altas cargas, polvo o humedad), reduce los intervalos.
Cambio de filtros
Los filtros son la barrera que protege al sistema de partículas que pueden provocar desgaste prematuro en componentes clave.
Por tanto, es conveniente hacer un chequeo de estos para controlar su estado. ¿Qué no debes pasar por alto? 👇
- Comprobar diferencial de presión (si el sistema lo permite).
- Revisar intervalos de cambio recomendados.
- Utilizar siempre filtros de calidad equivalente al original.
Un filtro saturado deja de filtrar o peor aún, deja pasar todo.
Presión de trabajo y ajustes
Las presiones en un sistema hidráulico no deben dejarse al azar. Si hay sobrepresión, los componentes sufren. Si es baja, la máquina pierde fuerza o velocidad.
Por tanto, hay que controlar regularmente 👇
- Presión del sistema.
- Presión de las válvulas de seguridad.
- Respuesta de acumuladores si los hay.
Una variación inesperada puede ser síntoma de que hay una bomba desgastada o una válvula obstruida.
¡Ojo con la temperatura!
El calor acelera la oxidación del aceite, reduce su viscosidad y acorta la vida útil de las juntas. Un sistema bien diseñado debe mantenerse dentro de su rango térmico óptimo.
Para evitar estos problemas, revisa👇
- Intercambiadores de calor (aire o agua).
- Ventiladores, termostatos y sensores.
Es importante que no haya obstrucción en las entradas de aire.
Estado del depósito y respirador
El depósito no solo almacena aceite, sino que también deja que se asienten partículas y permite la disipación de calor.
¿Qué debes chequear? 👇
- Limpieza del fondo del tanque (al menos una vez al año).
- Estado del respirador (filtro de aire).
- Tapas bien cerradas y juntas en buen estado.
Un respirador en mal estado puede meter humedad o polvo al sistema y ya sabes lo que eso significa.
Verificación de acumuladores
Si tu sistema lleva acumuladores, asegúrate de que 👇
- Mantienen la presión de precarga adecuada.
- No tienen fugas.
- Las válvulas asociadas funcionan correctamente.
No lo dejes hasta que empiecen los golpes de ariete o la presión caiga a cero.
Trazabilidad
Apunta todo. Cuándo cambiaste el aceite, qué presión tenía la bomba la última vez, cuándo revisaste los filtros, entre otras tareas.
Llevar un historial de mantenimiento ayuda a detectar patrones de fallos y permite planificar paradas con criterio.
Un sistema hidráulico puede ser tan fiable como el mantenimiento que se le dé. Esta checklist es una guía práctica para mantener la eficiencia, seguridad y vida útil de tus equipos. Aplicarla con rigor no solo reduce averías, sino que también mejora la productividad general de tus procesos.